El país de Mustakand peligraba porque el águila Calva, de nombre Ryan quería apoderarse de las riquezas como el agua, el viento, las manzanas, las praderas, el aceite que caían de los árboles y otros recursos.
Ryan gobernaba el reino de Norates, ubicado al norte del planeta Rajut, el
dirigente amenazó a varias naciones con ser ocupadas por su ejército si ellos
no entregaban determinados territorios.
Los presidentes quedaron muy temerosos, puesto que no contaban con una
fuerza para contrarrestar el poderío de las tropas del águila, quisieron
reunirse, sin embargo, desde su imponente árbol Ryan los amenazó con sanciones.
En ese momento Norates atravesaba por serias dificultadas domésticas con
protestas y manifestaciones por el alza del precio de los alimentos, las chozas
y la energía que calentaba a ese país.
Para contrarrestar esta situación, el águila calva encontró una salida a los
problemas internos y culpó a los trabajadores extranjeros de los males de la
nación.
Otra estrategia de Ryan fue enviar a las hormigas en barcos, con las patas
atadas, los ojos vendados y envueltas en pequeñas cajillas a sus países, acción
que ordenó para doblegar, intimidar y hacer valer su voluntad.
Al expulsar a los trabajadores-insectos foráneos de Norates, no había quien
recogiera las cosechas, empacara la leche, transportara los alimentos ni trabajara
en los almacenes porque los ciudadanos de esa nación solo laboraban en oficinas
con altos salarios.
El poderoso gobernante contaba con destacamentos de mercenarios en todas
las partes de Rajut, con aproximadamente setecientas bases con gruesas armas y
soldados bien entrenados.
Paralelamente, otro grupo de líderes se oponían a que Ryan los mandara porque
solo buscaba satisfacer el interés de sus compinches y no los del planeta.
La retórica de Ryan no funcionó en su país, hubo una explosión social por
el costo de la comida, a pesar de ello, lanzó sus tropas a la isla congelante
de Tibur, Mustakand y Lagorio.
Rajut se encendió, otras naciones pusieron en alerta a sus ejércitos, mientras
que los invadidos le aplicaron las tácticas de guerra de guerrilla o golpes al
invasor y retirada.
No fue fácil, pero Ryan al final cedió y sus tropas duraron veinte años en
las naciones ocupadas, la agresión no resultó por la incapacidad de los Norates
a largos y costosos enfrentamientos que terminan en desgaste.
Los invadidos estudiaron bien los puntos débiles de los soldados extranjeros,
por allí metieron su estocada y aplicaron el principio de que primero conoce a
tu enemigo y luego a ti mismo.