Un fantasma en cifras de lectores

Algunas organizaciones no gubernamentales, páginas de internet y el Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlalc) hacen estudios sobre la cantidad de libros editados en la zona o el mundo, lectores y ventas.

Sin embargo, Panamá solo existe para el Cerlalc, ya que las otras organizaciones ni la mencionan en sus análisis, lo que genera horror cultural y educativo en la tierra donde nací.

Por ejemplo: la página Lectupedia.com publicó estadísticas relacionadas con la cantidad de libros leídos por país en junio de 2022, pero Panamá no se encuentra ni tampoco los países centroamericanos.



Solamente un estudio de Cerlalc indica números sobre la cantidad de títulos registrados con ISBN del periodo 2014-2015, que señala 2,975 libros en el 2014 y 974 en el 2015.

Esta cifra ya la incluí en el primer artículo Vender libros en Panamá es como abrir un bar en Irán.

En la página de la Biblioteca Nacional, los números muestran que en el 2013 ingresaron, 2869 peticiones de ISBN, en el 2015 aumentó 2,975; lo que representó un incremento de 109 libros, pero en el 2015 hubo una brutal caída a 974 o 2001 libros menos.

Un espanto total y peor que en Panamá no se sabe nada de la cantidad de cifras de libros vendidos o lectores, no hay números sencillamente, un tema tabú como la muerte del presidente José Remón Cantera, que se desconoce, quién o quiénes fueron sus asesinos.

Lo cierto es que no sé si llorar o sentir vergüenza porque en Panamá existe capital abundante, tanto estatal como privado, no obstante, la sociedad prácticamente mira hacia otro lugar.



Para muestra un botón o los casi 10 mil libros que dejaron dañar de la biblioteca del Instituto Nacional, no ocurrió nada, cero sanciones, responsables y la vida sigue igual.

Que no existamos para las organizaciones internacionales en el tema de lectura es espantoso, horroroso, terrorífico y maléfico.

Para numerosos empresarios y políticos la lectura y la cultura no vende, tampoco consigue votos para un puesto de elección popular.

Esa es nuestra oscura realidad.

Con todo esto ojalá que haya una tabla de salvación, de lo contrario vamos culo para el barranco.

 

 

 

1 comentario:

  1. Aunque en pandemia se hizo un gran trabajo para mejorar los hábitos de lectura, en Panamá falta mucho todavía.

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